Comunicación: relatos, interpretaciones y opinión

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Comunicación: relatos, interpretaciones y opinión
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B932

Buitrago Trujillo, Hugo Andrei, compilador

Comunicación: relatos, interpretaciones y opinión / Hugo Andrei Buitrago Trujillo, compilador. – Medellín : UPB, 2020.

285 páginas, 14 x 21 cm. -- (Colección Mensajes)

ISBN: 978-958-764-824-9 (Versión e-pub)

1. Comunicación – Investigaciones. – 2. Comunicación social – 3. Periodismo. – I. Título (Serie)

CO-MdUPB / spa / RDA

SCDD 21 / Cutter-Sanborn

© Manuela Herrera Montoya

© Camila Arango Echeverri

© Laura Medina Guisao

© David Santiago Serna Lopera

© Manuela Ospina Correa

© Ana Isabel Loaiza Ramírez

© Manuela Granada Montoya

© Eylen Cristina Jalilíe López

© Miguel Alguero Montaño

© Hugo Andrei Buitrago Trujillo (Compilador)

© Editorial Universidad Pontificia Bolivariana

Vigilada Mineducación

Colección Mensajes

Comunicación: relatos, interpretaciones y opinión

ISBN: 978-958-764-824-9 (Versión e-pub)

Primera edición, 2020

Escuela de Ciencias Sociales

Facultad de Comunicación Social-Periodismo

Gran Canciller UPB y Arzobispo de Medellín: Mons. Ricardo Tobón Restrepo

Rector General: Pbro. Julio Jairo Ceballos Sepúlveda

Vicerrector Académico: Álvaro Gómez Fernández

Decano de la Escuela de Ciencias Sociales: Ramón Arturo Maya Gualdrón

Directora de la Facultad de Comunicación Social: María Victoria Pabón Montealegre

Editor: Juan Carlos Rodas Montoya

Coordinación de Producción: Ana Milena Gómez Correa

Diagramación: Ana Milena Gómez Correa

Ilustración portada: Camila Arango Echeverri

Corrección de Estilo: Cristian Suárez

Dirección Editorial:

Editorial Universidad Pontificia Bolivariana, 2020

Correo electrónico: editorial@upb.edu.co

www.upb.edu.co

Telefax: (57-4) 354 4565

A.A. 56006, Medellín, Colombia

Radicado: 1903-20-09-19

Prohibida la reproducción total o parcial, en cualquier medio o para cualquier propósito sin la autorización escrita de la Editorial Universidad Pontificia Bolivariana.

Diseño epub:

Hipertexto – Netizen Digital Solutions

contenido
Contenido

Presentación

Hugo Andrei Buitrago Trujillo

El cine latinoamericano se mira al espejo: los usos y reflexiones del metacine en América Latina

Manuela Herrera Montoya

Cómo pintar laberintos invisibles: una investigación sobre la creación de adaptaciones gráficas a partir de la interpretación de cada cuento en el libro Ficciones, de Jorge Luis Borges

Camila Arango Echeverri

Análisis de la representación de la mujer virgen en Rubiela Roja y Alcaparras, textos dramáticos de la dramaturga antioqueña Victoria Valencia

Laura Medina Guisao

Las sociedades de la transparencia en la distopía Black Mirror

David Santiago Serna Lopera

FanWorks: productos transmedia que dan continuidad a la saga y franquicia de Harry Potter

Manuela Ospina Correa

Periodismo sobre la cultura cafetera de los jóvenes de Fredonia

Ana Isabel Loaiza Ramírez

Prácticas educomunicativas en la elaboración de un producto comunicacional: un estudio de caso de la revista Ingenio de la Universidad Pontificia Bolivariana

Manuela Granada Montoya

Análisis semiótico de las caricaturas políticas sobre el proceso de paz en Colombia del año 2016, a partir de los dibujos humorísticos publicados en los medios de comunicación El Tiempo y El Espectador, durante el período de diciembre de 2016 a junio de 2017

Eylen Cristina Jalilíe López

Relaciones entre concejales y líderes comunitarios de Bucaramanga. Una mirada desde la Comunicación Política y Pública

Miguel Alguero Montaño

Notas al pie

presenta
Presentación

Hugo Andrei Buitrago Trujillo

El tercer volumen de los Ejercicios de investigación de los estudiantes de Comunicación Social-Periodismo de la Universidad Pontificia Bolivariana presenta, bajo el subtítulo “Relatos, interpretaciones y opinión”, abarca el lapso 2017-2018 y contiene algunos de los trabajos destacados por los profesores que acompañaros los cursos de Investigación en Comunicaciones II y los trabajos de grado de la Facultad.

Resulta interesante de este volumen que es el primero que surge como ejercicio Multicampus, por lo que cuenta con ejercicios de las sedes de Medellín, Montería y de Bucaramanga; pero además que, al igual que las publicaciones anteriores, da cuenta de la relevancia del abordaje integral de la comunicación por el que apuesta la Facultad de Comunicación Social-Periodismo de la UPB.

Al respecto de esta integralidad, podrá ver el lector cómo en cada uno de los capítulos que se presentan, es decir, en cada uno de los temas y abordajes investigativos de los comunicadores formados por la universidad, hay un bricolaje de disciplinas que dialogan en el campo de la Comunicación, que pasan por la pedagogía, la semiótica, el periodismo, la literatura, la imagen, la antropología, la historia, la filosofía, entre otros, para el entendimiento de problemas comunicacionales y la presentación de temas de interés público.

La conciencia de esta integralidad no evita la relevancia de brindar una ilación a partir de los énfasis y puertas de entrada seleccionados por los estudiantes para elaborar sus ejercicios investigativos, que en este caso se agruparon en: mensajes en el arte latinoamericano, relatos en las nuevas plataformas y periodismo y opinión pública.

Mensajes en el arte latinoamericano

En este apartado se encuentran tres miradas distintas a tres manifestaciones artísticas en Latinoamérica. Con respecto al cine, Manuela Herrera integra cinco países latinoamericanos para evidenciar los usos del metacine en las narraciones de este tipo en el territorio. En este ejercicio, la autora articula el corpus seleccionado con una importante gama de películas metaficcionales que sirven para comparar, analizar y evidenciar la relevancia de estas herramientas para la reflexión sobre las problemáticas presentes desde México hasta el sur del continente.

Precisamente uno de los más importantes escritores del sur, Jorge Luis Borges, es la base del ejercicio investigativo de Camila Arango, quien se arriesga en un trabajo de investigación creación-investigación aplicada, haciendo un análisis de los cuentos de Ficciones para hacer una adaptación gráfica de los mismos.

Desde un foco más local, Laura Medina se ocupa de la dramaturga antioqueña Victoria Valencia para rastrear, a partir de dos de sus obras, la presencia, permanencia, transformación y relevancia del rol de la mujer virgen, a partir de las categorizaciones realizadas por Duby y Perrot, presentadas en el contexto de las violencias colombianas.

Relatos en las nuevas plataformas

Dos perspectivas diferentes se brindan sobre esta temática. En la primera, Santiago Serna utiliza la serie Black Mirror, que pasó de la televisión inglesa a la plataforma Netflix, para hablar de la distopía y las sociedades de la transparencia, a partir de la crítica al uso nocivo de las tecnologías de la comunicación y de la conectividad que hacen sus creadores, tarea abordada con una perspectiva foucaultiana y del filósofo oriental Byung-Chul Han.

En la segunda, desde la transmedialidad, se indaga por el papel de los fanáticos en la construcción de relatos que dan continuidad a ficciones exitosas, labor en la que, como nos muestra la autora, Manuela Ospina, los medios sociales, la conectividad y las plataformas de juegos y contenidos cobran un rol relevante para la multiplicidad de contenidos apócrifos y sus productores.

Periodismo y opinión pública

El tercer grupo de trabajos ofrece dos perspectivas sobre la labor informativa y dos análisis de generadores de opinión. De tal manera, Ana Isabel Loaiza presenta el camino a través del cual construyó una pieza crossmedia sobre el relevo generacional en la cultura cafetera del municipio de Fredonia, dando algunos avances de lo que fue la pieza comunicacional.

 

Así mismo, Manuela Granada, da cuenta del medio de divulgación científica Ingenio, en el que se presentan procesos de educomunicación, y donde niños toman parte protagónica de la tarea informativa, de la mano de profesionales de la comunicación y docentes.

Eylin Jalilíe optó por el análisis semiótico de las caricaturas de El Tiempo y El Espectador que aludieron al proceso de paz; retomando las ideas de Peirce y Barthes, detalla las diferencias editoriales de los caricaturistas de uno y otro diario.

Por otro lado, Miguel Alguero se aproxima a las relaciones comunicacionales entre los concejales y los líderes bumangueses, identificando las contradicciones que hay entre las representaciones que unos y otros tienen sobre ese relacionamiento en razón de la calidad del mismo.

Relatos, interpretaciones y opinión se une con Imágenes, imaginaciones, letras y opiniones y con Narraciones, identificaciones e industrias culturales como insumos pedagógicos para los procesos de investigación en comunicaciones; pero, a la vez, como un boceto de los caminos que la profesión debe transitar en medio de las sociedades actuales y en transformación.

metacine
El cine latinoamericano se mira al espejo: los usos y reflexiones del metacine en América Latina

Manuela Herrera Montoya *

Resumen

¿Por qué una obra cinematográfica se reconocería como obra? ¿Acaso el decirnos que somos espectadores no acaba con la magia del cine? El cine no es solo magia, la magia no es solo irrealidad. Las películas que se narran por medio de la metaficción son aquellas que se reconocen como obras cinematográficas, cuestionan el arte, la sociedad y la vida; se quitan el disfraz de “película”, sin dejar de serlo, para convertirse en una historia creada –a veces mostrando cómo–, y realizada por personas que necesitan cuestionar no solo la vida y la sociedad, sino también el arte que las expresa. Este trabajo habla de la metaficción, método de narrar que en este caso es llevado al cine en América Latina, analizando las reflexiones y usos para intentar buscar un por qué se utiliza este.

Palabras clave: Metaficción, Metacine, Cine latinoamericano, Autorreflexividad, Narración metatextual.

Introducción

La metaficción se encarga de indagar y reflexionar sobre el arte en sí mismo, y se puede ver en la literatura, en la pintura, en el cine, entre otros. Una de sus características principales es el juego entre la ficción y la realidad, creando una cercanía con el espectador para llevarlo a pensar y a reflexionar mientras contempla la obra.

Este modo de narrar es utilizado especialmente en la literatura para especular sobre el acto mismo de crear una historia, sobre la literatura misma, o sobre el ser escritor, la vida de los personajes creados, entre otros temas. Es en el ámbito literario donde la metaficción ha tenido un mayor desarrollo. En el cine –que no está alejado de la literatura– también se ha explorado este campo, llevando al lenguaje audiovisual, con sus herramientas narrativas y formas de expresión, a implementar la metaficción como medio de reflexión acerca del cine. La apropiación de la metaficción aplicada al campo cinematográfico es tal que pasa a conocerse como metacine, género que incluye películas que se reconocen como creación cinematográfica o que hablan de cualquier aspecto del cine.

La obra se mira en un espejo para hablar acerca de ella y de su campo de acción, una historia ficticia que se reconoce como ficción pero que no por ello deja de serlo. Por ende, la metaficción es considerada una actividad riesgosa (Zavala, 2010), pues los límites entre la realidad y la ficción se vuelven borrosos.1 O como lo dice Borges (1952): “[…] tales inversiones sugieren que si los caracteres de una ficción pueden ser lectores o espectadores, nosotros, sus lectores o espectadores, podemos ser ficticios” (pp. 30-31). Este juego entre lo real y lo ficticio es utilizado primordialmente para que el lector o espectador se involucre en la obra y reflexione junto al creador, despertando en él una confusión que lo lleve a meditar sobre los temas cuestionados en la historia.

Por otra parte, es importante tener en cuenta que la metaficción no surge caprichosamente. Según Emilia Michel Mata (2014), no hay un momento histórico concreto en el que esta se haya aplicado; pero siempre que aparece, sea en el campo que sea, es porque algún autor vio la necesidad de reflexionar y cuestionar sobre el arte mismo, influenciado por la situación social en la que se encontraba.

En ese sentido, en América Latina han surgido manifiestos en torno a la realización cinematográfica y se ha utilizado el metacine como una forma de narrar que, en ocasiones, busca separarse de lo enseñado por el cine hollywoodense y que saca a relucir lo que es Latinoamérica en cuanto a cine, buscando una especie de identidad cinematográfica. Sin embargo, este fenómeno no ha sido analizado suficientemente, y por ello, surge el planteamiento del presente trabajo. La investigación pretende, entonces, analizar el uso del metacine en el cine latinoamericano, en cuya vía identifica los temas sobre los que se reflexiona por medio de este; así como las problemáticas que justifican su uso en este contexto, y señala las propuestas narrativas metaficcionales inspiradas por el cine latinoamericano.

El proceso inició con la observación de quince películas extranjeras, que dieron a conocer cómo funciona la metaficción dentro del cine, mostrando temas de reflexión y parámetros de comparación con América Latina. Luego, para llegar a la selección final de cinco películas latinoamericanas, se vieron dieciocho, de las cuales la mayoría fueron recomendadas por el doctor Lauro Zavala, sumándole otras encontradas en trabajos sobre el tema, algunos de ellos mencionados en el estado del arte.

La época y el país de origen no fueron relevantes en la selección, pero el factor social y/o cinematográfico del momento sí, por lo que no se limitó la investigación a una época, pero sí a unas cuantas películas. Las cintas seleccionadas cumplieron con el requisito del juego entre lo ficticio y lo real y con al menos una de las siguientes condiciones: se reconoce como creación cinematográfica o habla sobre el cine. Estas fueron: La tarea de México (Hermosillo, 1991), El elefante y la bicicleta de Cuba (Tabío, 1994), Entre Marx y una mujer desnuda de Ecuador (Luzuriaga, 1996), Pompeya de Argentina (Garateguy, 2010) y Petecuy, la película de Colombia (Hincapié, 2014).

La investigación cuenta con cuatro momentos donde, tras una mirada conceptual y de algunos trabajos similares, se presentan aquellas reflexiones halladas en el metacine de Latinoamérica, reflexiones que van desde el cine como arte, hasta la necesidad que posee una sociedad de contarse por medio de juegos metaficticios.

Metacine, el arte de mirar a la cámara

Ahondando en su significado, en el término metaficción tenemos que el prefijo meta, según Laura Vizcaíno (2016), significa “más allá”. Por lo tanto, metaficción significa “más allá de la ficción”. Ahora bien, un relato metaficcional es aquel que leemos, o que vemos, mientras somos conscientes de que estamos presenciando dicha invención. Es “la ficción hablando de sí misma para mostrar sus construcciones internas, sin dejar de ser ficcional” (Vizcaíno, 2016, p. 34). En otras palabras, el elemento metaficcional da cuenta de la construcción de la obra como tal, y en ocasiones se realiza sin disfraz alguno (Vizcaíno, 2016), recordándole al espectador que está presenciando una historia que fue creada por alguien. Por ello, el personaje del narrador o director es importante en este género, pues en ocasiones la historia contiene una autoconsciencia del relato por parte del escritor, creador o director.

Gérard Genette explica en Figuras III (1989) que existe el narrador extradiegético y el intradiegético. El narrador extradiegético es aquel que se encuentra fuera de la historia, y el intradiegético es aquel que participa de los hechos que narra. Por ende, la diégesis es el mundo ficticio en el que sucede la historia narrada y la extradiégesis lo contrario. Así, en la metaficción se ve un constante juego entre estos dos mundos. “Lo más sorprendente de la metalepsis radica en esa hipótesis inaceptable e insistente de que lo extradiegético tal vez sea ya diegético y el narrador y sus narratarios, es decir, ustedes y yo, tal vez pertenezcamos aún a algún relato” (Genette, 1989, p. 291).

Uno de los elementos resaltados por Alba Clemencia Ardila (2013) a la hora de comprender la metaficción es el elemento de ficción-realidad, pues hay un constante juego entre estos dos polos, problematizando sus límites y creando cuestionamientos a partir de procesos de autoconciencia, autorreferencialidad y autorreflexividad. Estos procesos los define Diego Pérez (2015) diciendo que la metaficción es el término general de la obra que habla de sí misma.

El primero es la autorreflexividad, herramienta narrativa que reflexiona sobre el hecho estético mismo, dedicándose a explorar el entorno donde se construye la obra; el segundo es la autorreferencialidad, donde se indaga sobre el mundo interno de la historia, incluyendo la vida del autor en la mayoría de casos; y el tercero es la autoconciencia en cuanto al personaje, pues este es consciente de su condición y lidia con el hecho de reconocerse como personaje –dicho recurso se conoce también como anagnórisis metaficcional2 (Pardo, 2011)–.

Algunos ejemplos de metaficción, según Vizcaíno (2016), serían: cuando un texto retoma otro relato (intertextualidad), cuando el autor de la historia aparece en la misma como un personaje más (metalepsis), o cuando la historia relata una historia que cuenta otra, y así sucesivamente hasta convertirse en una especie de laberinto (puesta en abismo). Ahora bien, estos mismos ejemplos, y muchos otros más, se pueden encontrar en el cine, desarrollados por la narrativa audiovisual que este propicia.

Según Pardo (2011) hay dos tipos de metaficción que se pueden considerar al analizar este elemento en las películas: la metaficción en el cine y la metaficción fílmica. El primer tipo encierra películas que no son el elemento metaficticio como tal, historias que usan la metaficción pero sin involucrar al cine; es decir, la película no se reconoce como película ni habla sobre el cine. Esto sucede, por ejemplo, cuando vemos metaficción literaria, como en Stranger than Fiction (Foster, 2006) o metaficción teatral como en Synecdoche, New York (Kaufman, 2008). Historias que utilizan la metaficción, pero no el metacine. El segundo tipo de metaficción es la metaficción fílmica, el foco de esta investigación, y se refiere a las películas que se saben películas, es decir, que se reconocen como un acto de creación fílmico o que hablan del cine, de hacer películas y de todo tipo de temas en torno a esto, como ser director, guionista, actor, etcétera.

 

A la metaficción fílmica se le conoce también como metacine, y es aquella metaficción desarrollada por el cine, o el cine dentro del cine, es decir, “la autorreferencialiadad por antonomasia, el discurso mostrado en construcción” (Navarrete, s.f., p. 3). Además, según Pardo (2011):

La metaficción fílmica permite así profundizar en la problemática propia del cine, si bien para realizar una reflexión de índole general sobre la función del cine en la vida –el cine como arte (o institución), más que sobre la propia película (el medio). (p. 165)

Situación que coincide con lo dicho anteriormente sobre la metaficción, que no se da azarosamente, y que idealmente siempre tiene una justificación para hablar sobre el cine en cierto lugar del mundo.

El metacine, como estrategia narrativa, dice la licenciada en Estudios Literarios Emilia Michel Mata (2014), es: “[…] un concepto que no es fijo y que ha viajado entre disciplinas, entre estudiosos, entre periodos históricos y entre comunidades académicas geográficamente dispersas” (p. 5), para reflexionar acerca del oficio mismo y para “reflexionar acerca de los procesos y las creaciones artísticas” (Mata, 2014, p. 17). Una excepción a esta definición es cuando se utiliza para expresar el existencialismo gracias a la confusión entre la ficción y la realidad que esta puede despertar, sensación que también se usa para llegar al espectador y hacerlo partícipe de las reflexiones y dudas en torno a la expresión de arte.

Una película que puede servir como ejemplo es Adaptation (Jonze, 2002), en la que un guionista pasa por una crisis de escritura cuando tiene que adaptar un libro al cine; tanto sufre escribiendo el guion que al final la película resulta ser el mismo guion que él escribió, donde la historia no es la adaptación del libro, sino la travesía de la adaptación.

El metacine suele reflexionar sobre temas como la crisis de ser guionista (vista en Adaptation); la confusión de una persona que se da cuenta de que es un personaje de una película, lo que implica ver la vida como una farsa; o que el autor muera, pues los personajes al darse cuenta que son personajes, ganan poder y se salen de las manos de este (como sucede en The Purple Rose of Cairo (Allen, 1985) o en la película española Fuera del Cuerpo (Peñarrocha, 2004)); también se pueden encontrar reflexiones acerca de ser actor o de la propia industria del cine, como críticas a Hollywood, a la vanidad, entre otras. Se recurre a la metaficción para criticar o cuestionar la obra, el cine o la vida, pues la obra puede hablar de cine, pero también puede reconocerse como obra cinematográfica sin tener la necesidad de hablar sobre esta expresión artística.

Además, esta forma de narrar se manifiesta en momentos que implican que el espectador se comprometa de manera particular frente a un tema específico, y no se conforme con quedarse sentado frente al televisor mientras la película pasa delante de sus ojos. El dadaísmo y la lata de Campbell, son dos ejemplos dados por Emilia Mata (2014) para decir que siempre hay puntos de quiebre en donde el arte se cuestiona a sí mismo sin tener la posibilidad de dividirse de los procesos históricos.

Las situaciones sociales y políticas que acompañan a los artistas a crear [… es decir] momentos de ruptura son claves en la historia del arte y las humanidades, para reafirmar lo que se hace, para elaborar cambios, para transformar, innovar y sobre todo para proponer. (p.16)

La metaficción entonces surge por la necesidad de cuestionarse, expandiéndose a otras artes a partir de la literatura y llegando al cine para preguntarse qué es, cómo se escribe, cómo se realiza y por qué se hace (Mata, 2014, p. 17).

Es por ello que surge el interés de ir a una región que socialmente tiene problemáticas que influencian y generan reflexiones en sus artistas locales, como Latinoamérica, en torno al cine y a la sociedad, las cuales propician el surgimiento del uso del metacine como expresión narrativa. Por eso, La tarea (Hermosillo, 1991), El elefante y la bicicleta (Tabío, 1994), Entre Marx y una mujer desnuda (Luzuriaga, 1996), Pompeya (Garateguy, 2010) y Petecuy, la película (Hincapié, 2014), son ejemplos que cuentan con reflexiones acerca del cine y la sociedad, donde las problemáticas sociales propiciaron esta manera de narrar y nuevas propuestas narrativas creadas en América Latina que utilizan el metacine.

Varias investigaciones pueden dar pistas para ese abordaje, como Metacinema: a modern necessity (Siska, 1979), donde se menciona que esta tendencia se presenta en la literatura desde 1890. Este texto menciona que la modernidad –hablando en 1979– presentaba películas que reflexionaban sobre sí mismas, sobre el acto de crear películas, explicando por qué se recurría a estos medios, pero sin profundizar mucho en la reflexión a la que apuntan.

También aparece El cine dentro del cine (Navarrete, s.f.) que retoma la literatura como una influencia inescapable para el cine, pues los dos hacen referencia a lo que es la realidad social. El autor se centra en la premisa de la citación, diciendo que “toda novela o película es una citación, no de otra obra literaria o cinematográfica, sino de un discurso social incidente en el proceso creativo del escritor o director de cine” (p.1). Ante esto decide analizar el cine español por medio de 18 películas que cumplen con ese elemento, teniendo en cuenta que la finalidad del metacine, según él, es la fracción del discurso y la reflexión del espectador (p. 3) –lo cual se sostiene en este trabajo, pues el juego entre lo ficticio y lo real es clave para hablar de metacine–.

Cine dentro del cine (italiano) es otra investigación que se encarga de estudiar 20 películas italianas, dentro de una perspectiva más amplia a la de solo citación (de los Santos, s.f.). Al igual que el trabajo de Navarrete, de los Santos aborda muchas películas, por lo que no logra profundizar en lo que ellas reflexionan o lo que el metacine busca expresar con ellas; aun así, es importante resaltar lo que hace el primero de estos dos trabajos, pues analiza la reflexión del cine dentro del cine español por medio de películas.

Otra investigación que es oportuno mencionar es La metaficción de la literatura al cine. La anagnórisis metaficcional de Niebla a Abre los ojos (Pardo, 2011) donde, como en los trabajos anteriores, se tiene en cuenta la literatura como una expresión que influye en el cine, con la diferencia de que se piensa al cine como un campo diferente que puede tener rasgos independientes.

También se puede hablar de El cine de metaficción en la cinematografía colombiana de los primeros 15 años del siglo XXI, un proyecto de investigación-creación cinematográfico (Sepúlveda, 2016), el cual identifica las películas colombianas que cumplen con el modelo metaficcional, independientemente si son metaficción fílmica (metacine) o metaficción en el cine. Sin ninguna reflexión, define conceptos e identifica películas teniendo en cuenta el modo de narrar y de hacer metaficción en la literatura para relacionarlo con el cine.

Otro trabajo, que aunque se enfoca exclusivamente en tres películas de Woody Allen, teniendo en cuenta la influencia de la literatura, pero poniendo como elemento primordial la reflexión que realiza el director por medio de la metaficción en sus películas, es Cine meta-ficcional en Woody Allen, un discurso narrativo (Pérez, 2015). Allí, el autor se centra principalmente en identificar las reflexiones de las películas por medio del metacine, teniendo en cuenta como punto fundamental a analizar las crisis de los escritores de cine durante los procesos creativos de sus obras.

Dentro de este mismo orden de ideas, La metaficción desde la literatura hacia el cine: una estrategia narrativa analizada en El ladrón de orquídeas (Mata, 2014), tiene en cuenta la literatura como base del metacine, donde también se valora el cine por sus propios medios. Mata toma el concepto de metaficción en el cine como metacine, encargándose de desarrollar el término central de esta investigación.

Ya en América Latina, el artículo “Brecht en La Habana: autorreferencialidad, desfamiliarización y cine dentro del cine en la obra de Juan Carlos Tabío” (Navarro, 2006), menciona la teoría de Julio García Espinosa en el texto Por un cine imperfecto, la cual propone una nueva forma de narrar, utilizando el metacine para criticar la situación social en el subcontinente. Esta teoría se convirtió en un auténtico manifiesto del cine latinoamericano contra la estética hollywoodense, apoyando y pidiendo un séptimo arte que no ocultara las limitaciones materiales al hacer cine en Latinoamérica (Navarro, 2006). Este artículo confirma el recurso del metacine en América Latina y propone razones de su uso. Así mismo, “La parodia en el cine argentino contemporáneo: Upa! Una película argentina” (Soria, 2013), habla sobre el Manifiesto Grupo Acción, que utiliza el metacine entre sus reglas para criticar el Nuevo Cine Argentino. Este tipo de manifiestos serán tenidos en cuenta para encontrar respuestas a los usos y temas del metacine en América Latina.