Plantas medicinales para toda la familia

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Reconstruir y fortalecer el sistema nervioso

Para superar una depresión, es necesario fortalecer el sistema nervioso a fin de que pueda actuar como el maravilloso receptor y distribuidor de energía que es. Consulta el apartado Superalimentos para el bienestar (pág. 19); sigue una dieta rica en calcio y vitaminas del grupo B, y toma tres tazas al día de la Infusión rica en calcio (pág. 48), los tónicos para el sistema nervioso 1 y 2 (pag. 48) o la Fórmula para la depresión que aparece a la derecha.

Toma sobre todo plantas medicinales específicas para la depresión y la tristeza, como la lavanda, la melisa, la avena y el hipérico. Este último se ha convertido en un antidepresivo natural tan popular que ha eclipsado a los demás. Pero la avena (sumidades, tallos y copos) también es muy útil para la depresión y la ansiedad; actúa de manera lenta pero efectiva, reforzando la mielina que recubre las terminaciones nerviosas y reduciendo así el estrés y la irritabilidad. La pasiflora, por su parte, fortalece y tonifica el conjunto del sistema nervioso; combínala con melisa, avena e hipérico para obtener una excelente infusión antidepresiva. La valeriana ayuda a regular el sueño, mientras que la ashwagandha, el astrágalo, el ginseng y el regaliz contribuyen a aumentar la energía de nuestro sistema a nivel celular.

Por la noche date baños de lavanda y melisa. Si tienes jardín, recoge pétalos de rosa y borraja y añádelos al agua. Los baños aromáticos resultan muy relajantes para un alma fatigada. Si puedes, instala una bañera en el jardín; es imposible sentirte deprimido mientras te das un baño con pétalos de flores rodeado de vegetación; aunque sea breve, constituye un buen remedio para alejar las preocupaciones de la vida.

FÓRMULA PARA LA DEPRESIÓN

2 partes de manzanilla

1 parte de flores de borraja

1 parte de melisa

½ parte de flores de lavanda

½ parte de pétalos de rosas

Mezcla los ingredientes y prepara una infusión siguiendo las indicaciones de la página 357. Toma tres tazas al día.

Inicia un programa de salud completo

La depresión suele relacionarse con las pérdidas y las emociones, pero muchas veces está causada directamente por desarreglos químicos del organismo. En este caso, también son muy útiles la fitoterapia, los suplementos nutricionales, el ejercicio físico y la dieta y el descanso adecuados. Una dieta adecuada es clave. Si sufres un trastorno depresivo o de ansiedad, busca un naturópata que te recomiende un protocolo de suplementos nutricionales para superar los momentos más críticos.

El ejercicio es una parte importante de cualquier terapia contra la depresión. Encuentra una rutina que puedas practicar con constancia. Aunque el gimnasio esté bien, nada resulta más tonificante que interactuar con la naturaleza: caminar, hacer excursiones por la montaña, montar en bicicleta, en canoa… Deja que te cuiden la Madre Tierra y el espíritu sanador de la naturaleza.

Date masajes a diario. A veces, tratar los problemas de fuera hacia dentro ayuda a sanar su origen.

Utiliza esencias florales

Las esencias florales son especialmente útiles en caso de depresión y tratan directamente el origen del problema, incluso cuando este es desconocido. Acude a un terapeuta especializado o consulta una guía que te ayude a seleccionar las esencias florales que necesitas. En la pág. 50 encontrarás una lista de esencias para distintos trastornos del sistema nervioso.

Sanación a través de la lectura

Si te sientes deprimido, te recomiendo leer el maravilloso libro de Thomas Moore, El cuidado del alma. Cultivar lo profundo y lo sagrado en la vida cotidiana. En mi opinión, las palabras de Moore son increíblemente alentadoras. Aunque no trate de forma específíca de la depresión, es una guía para vivir con intensidad en un mundo turbulento, es decir, un alimento para las almas atormentadas. Pero no te limites a un solo libro; lee cualquier obra que eleve tu espíritu y alivie tu alma.

*Se refiere a la semilla de la avena cuando aún está fresca y al exprimir suelta una savia blanca y lechosa. Sin embargo, no es fácil conseguirla, en cuyo caso se puede utilizar paja de avena, tanto el tallo como toda la parte aérea de la planta seca. [N. de la E.].

* Líquido que resulta al separar la fracción grasa de la leche (la mantequilla) del suero. Si se obtiene de nata fermentada, se trata de un lácteo fermentado. En los países anglosajones es muy conocido y se denomina buttermilk [N. de la E.].

* Siempre que aparezca la avena en una receta, lo ideal es usar la planta verde y fresca, en caso de no conseguirla usar paja de avena que es la planta seca. [N. de la. E.]


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Remedios caseros para las dolencias más comunes

En el pasado las lesiones y enfermedades las trataba un miembro de la familia o el curandero o herborista de la comunidad. En la actualidad puede resultar abrumador elegir entre la amplia variedad de tradiciones, técnicas y sistemas de sanación que tenemos al alcance. Cuando tú o un familiar estáis enfermos o heridos, ¿cuál es la forma más sensata e inteligente de actuar? ¿Ir al hospital? ¿Pedir consejo a un naturópata? ¿Esperar a que la enfermedad responda a los remedios caseros? Por supuesto, cada situación es distinta. En determinados casos, puede ser aconsejable ir al hospital y tomar antibióticos; en otros, la fitoterapia y los tratamientos naturales pueden ser la opción más adecuada. ¿Cómo saberlo?

Mi filosofía es la siguiente: si crees que tu abuela trataría el problema en casa, probablemente tú también puedas hacerlo. Es una afirmación radical, lo sé, y, por supuesto, tiene excepciones. No obstante, las plantas medicinales ofrecen propiedades curativas increíbles si sabemos cómo aprovecharlas. Aunque también puedan ser útiles en situaciones complejas (a veces, incluso aquellas que implican un riesgo para la vida), se usan de forma más generalizada y efectiva como remedios caseros. Cuando estudias y conectas con las plantas, aprendes a confiar en ellas y en ti mismo para resolver la mayoría de las dolencias más comunes.

Fitoterapia versus medicina alopática

La fitoterapia y la medicina alopática occidental parecen vivir en conflicto, pero en realidad se complementan y funcionan estupendamente juntas, aumentando las posibilidades de alcanzar y mantener la salud y el bienestar. Aunque sea cierto que determinadas plantas medicinales muy potentes no deben utilizarse en combinación con medicamentos alopáticos, la mayoría no interfieren en su acción y pueden utilizarse para potenciar los tratamientos convencionales.

Mientras que los medicamentos alopáticos destruyen las bacterias y los virus, las plantas medicinales refuerzan y restauran el organismo. Mientras que los primeros suelen tener un objetivo específico, la fitoterapia trata y restaura el conjunto del organismo a través de un complejo proceso bioquímico. Cuando se toman correctamente, los remedios fitoterapéuticos no alteran la armonía inherente de nuestro cuerpo, por lo que apenas producen efectos secundarios. De hecho, complementar los fármacos sintéticos con fitoterapia ayuda a eliminar o disminuir sus efectos secundarios.

COMBINAR PLANTAS MEDICINALES Y FÁRMACOS

Si estás tomando cualquier tipo de medicación alopática, consulta con un médico (a poder ser, un naturópata), antes de complementarlo con fitoterapia. Algunas plantas medicinales son muy potentes y pueden provocar reacciones adversas cuando se combinan con fármacos.

A diferencia de la medicina alopática, la fitoterapia es extremadamente efectiva como medicina preventiva. Las plantas restauran y fortalecen la inmunidad natural y los mecanismos de defensa del organismo nutriendo su ecología profunda a nivel celular. Nuestro cuerpo reconoce y aprovecha sus propiedades medicinales, simplemente porque hemos evolucionado con ellas en este planeta durante millones de años, respirando el oxígeno que producen para nosotros, alimentándonos de lo que nos ofrecen y disfrutando de la belleza que crean a nuestro alrededor.

Cuándo utilizar la fitoterapia

Cada situación en la que se requiere algún tipo de atención médica es distinta. Las siguientes pautas te ayudarán a reconocer cuándo la fitoterapia puede ser más útil que los tratamientos alopáticos.

Como medicina preventiva. Las plantas medicinales tienen una capacidad inigualable para aumentar y fortalecer la inmunidad natural y los mecanismos de defensa del organismo. También son potentes adaptógenos; es decir, aumentan la capacidad del organismo de adaptarse al estrés y los cambios del entorno. Nuestro cuerpo reconoce las plantas medicinales y sabe aprovechar sus propiedades. Utilizadas de forma regular, nos permiten prevenir muchos problemas de salud.

En la mayoría de las situaciones médicas que no sean una emergencia. La fitoterapia es muy efectiva para tratar problemas leves o cotidianos, como contusiones, inflamaciones, torceduras, cortes, heridas, resfriados, fiebres moderadas y quemaduras superficiales. Las plantas medicinales también son útiles como primeros auxilios en situaciones de emergencia hasta que llega la atención médica apropiada.

 

Como agentes terapéuticos. Si eliges someterte a formas de tratamiento más radicales para tratar enfermedades graves, como el cáncer, el sida u otros trastornos autoinmunes, las plantas medicinales son muy útiles como agentes terapéuticos complementarios, restaurando y potenciando la energía vital del organismo. En situaciones graves como estas, la fitoterapia y la medicina alopática son compatibles y trabajan de forma adicional a favor de los beneficios del tratamiento.

Cuándo buscar ayuda

En este libro describo los remedios naturales que considero más eficaces para tratar las enfermedades más comunes del ser humano. La mayoría de las enfermedades, desequilibrios y lesiones responden bien cuando se adoptan una alimentación adecuada, descanso y estos tratamientos naturales suaves. No obstante, si tu cuerpo no responde bien o con la suficiente rapidez, consulta a un médico, a ser posible, uno formado en naturopatía. Por supuesto, ante una emergencia o situación que implique riesgo para la vida, dirígete lo antes posible a un hospital o servicio médico de urgencias.


Pie de atleta

El pie de atleta es una infección por hongos en los pies. A menudo produce picor y puede extenderse a las manos. Para tratarlo, es importante mantener los pies secos; los calcetines, limpios, y permanecer descalzo o usar sandalias el mayor tiempo posible para que el pie respire.

Existen varios tratamientos para esta infección común. Aplica unas gotitas de aceite esencial de árbol del té directamente sobre la zona infectada; remoja los pies varias noches por semana en una palangana con agua caliente con chaparral (también llamado «gobernadora», Larrea tridentata) y aceite esencial de árbol del té. O prueba una de las siguientes recetas.

POLVOS ANTIFÚNGICOS

Unos polvos muy efectivos y fáciles de preparar. Si no encuentras sello de oro de cultivo ecológico, elimínalo de la receta.

½ taza de arcilla blanca para uso cosmético o arrurruz en polvo

1 cda. de chaparral en polvo

1 cda. de cáscara de nogal negro en polvo

1 cucharadita de sello de oro de cultivo ecológico en polvo

1 cdta. de aceite esencial de árbol del té

Mezcla los polvos, añade el aceite esencial de árbol del té y remueve bien. Deja que la mezcla se seque y consérvala en un recipiente apto para espolvorear, en un lugar fresco y seco. Aplica los polvos en los pies una o dos veces al día.


EQUINACEA

UNGÜENTO ANTIFÚNGICO

Este ungüento para el pie de atleta también es eficaz para tratar heridas y zonas secas o agrietadas. Lo he utilizado con éxito para otras infecciones fúngicas, así como para la sarna en animales. Si no encuentras sello de oro de cultivo ecológico, elimínalo de la fórmula.

2 partes de chaparral

2 partes de cáscara de nogal negro

1 parte de sello de oro de cultivo ecológico

1 parte de mirra

1 parte de equinácea

Unas gotas de aceite esencial de árbol del té

Sigue las indicaciones para preparar ungüentos en la página 361. Aplícalo dos veces al día, por la mañana y por la noche.

Quemaduras

Las quemaduras pueden ser causadas por el fuego, la luz solar o determinados productos químicos. Por lo general, las de primer y segundo grado pueden tratarse eficazmente en casa; pero asegúrate de mantener la zona limpia para evitar una infección. Si esto ocurriera, acude al médico. En el caso de las quemaduras de tercer grado, la atención médica es siempre necesaria.

Al tratar una quemadura, primero enfría la zona para apagar el fuego. Sumérgela en agua helada o coloca encima una compresa con vinagre de sidra de manzana diluido en agua, durante al menos media hora. Luego elije uno o varios de los siguientes tratamientos:

• Aplica una cataplasma desinfectante y refrescante, con dos o tres gotas de aceite esencial de menta disueltas en un cuarto de taza de miel.

• Aplica gel de aloe vera: refresca, desinfecta y cura las quemaduras.

• Toma tintura de valeriana para ayudar a aliviar el dolor (consulta las dosis en la página 357).

• Para curar y aliviar el dolor de las quemaduras del paladar causadas por alimentos o bebidas calientes, prepara una pastilla de olmo rojo y miel (consulta las indicaciones en la página 364).

• Aplica Ungüento de hipérico (véase la receta abajo), útil para cualquier tipo de daño en las terminaciones nerviosas.

UNGÜENTO DE HIPÉRICO

El ungüento y el aceite de hipérico son especialmente efectivos cuando se aplican por vía tópica sobre quemaduras. Esta fórmula también es ideal para erupciones en la piel, cortes y heridas. La elaboré por primera vez en 1974 y resultó tan eficaz que he seguido utilizándola desde entonces.

1 parte de flores de caléndula

1 parte de hoja de consuelda

1 parte de hojas y flores de hipérico

Sigue las indicaciones para preparar un ungüento en la página 361. Aplícalo sobre la zona afectada dos o tres veces al día.

Aloe vera, una planta versátil

El gel fresco de la planta del aloe vera es fácil de extraer. Selecciona una hoja grande y suculenta y córtala con cuidado (el corte exudará una sustancia gelatinosa y cicatrizará en pocas horas). Realiza una incisión longitudinal en el borde de la hoja (de la longitud necesaria para realizar una sola aplicación de gel) y retira el gel del interior con una cucharita. Este gel puede aplicarse directamente sobre cualquier quemadura, herida o erupción. Si no utilizas toda la hoja, envuélvela en film transparente y guárdala en la nevera, donde se conservará varios meses.

Nota: Nunca apliques gel de aloe vera sobre una zona infectada por estafilococos, pues sellará la bacteria dentro y creará el entorno perfecto para su proliferación.

Resfriados y gripes

Los resfriados y las gripes son infecciones del tracto respiratorio superior que a menudo afectan a la garganta, los ojos, la nariz y la cabeza. Para tratarlos se recomienda el reposo en cama, aunque no siempre es posible. Por suerte, existen otros tratamientos asequibles y fáciles de poner en práctica.

Para recuperarte de una gripe o un resfriado, no tomes alimentos pesados y evita todos los lácteos y cualquier otro alimento que aumente la mucosidad, como el azúcar o el zumo de naranja. Consume productos poco procesados y que te ayuden a entrar en calor. El caldo es ideal; tómalo varias veces al día. Añade a las sopas plantas medicinales, como el astrágalo y la equinácea; y, por supuesto, come cebolla y ajo, los mejores remedios de la naturaleza para los resfriados y las gripes.

El curri tradicional se elabora con una mezcla de plantas medicinales, como la cúrcuma y la pimienta de Cayena, que estimulan y activan el sistema inmunológico. Sofríe rodajas de cebolla y dientes de ajo con una cantidad generosa de curri en polvo. Además de estar delicioso, limpia los senos nasales y ayuda a combatir la gripe y el resfriado.

Tratamiento de choque para el resfriado

Elabora tu propia tintura de equinácea antes de que llegue el frío (véase pág. 362). Para evitar el avance de un resfriado, ante los primeros síntomas toma media cucharadita cada media hora. Si ya estás resfriado, toma una cucharadita cada dos horas.

Toma a diario varias tazas de infusión de milenrama, menta y saúco (una antigua fórmula gitana) o de jengibre recién rallado con miel y limón. Para un extra de picante, suelo espolvorear un poco de pimienta de Cayena sobre la infusión de jengibre. Ambas infusiones te ayudarán a expulsar el resfriado a través del sudor.

CÓCTEL EXPLOSIVO CON VINAGRE DE SIDRA

Otro de mis remedios favoritos. Sabroso, efectivo y fácil de elaborar, ¡pero no apto para aprensivos! Prepáralo antes de que llegue el frío y tendrás provisiones para toda la temporada.

1 litro de vinagre

1 cebolla, picada

1 cabeza de ajo, pelado y picado

¼ de taza de rábano picante fresco, rallado

2 cucharadas de cúrcuma en polvo

Pimienta de Cayena

1 taza de miel (al gusto)

1. Mezcla en un recipiente el vinagre, el rábano picante, la cebolla, el ajo, la cúrcuma y una o dos pizcas de pimienta de Cayena. Cubre y deja macerar la mezcla en un lugar cálido, entre tres o cuatro semanas.

2. Cuela el líquido, añádele la miel y consérvalo en un recipiente cerrado, en la nevera. Ante el primer síntoma de resfriado, empieza a tomar una o dos cucharadas cada dos o tres horas, hasta que los síntomas remitan.

SELLO DE ORO

Conjuntivitis

La conjuntivitis es una inflamación ocular muy contagiosa, que provoca enrojecimiento, hinchazón y picazón. Al frotarse los ojos por el picor, la persona se pasa la infección de un ojo al otro sin darse cuenta. La conjuntivitis aparece principalmente en personas con el sistema inmunológico débil. Para fortalecer la inmunidad natural del organismo, toma entre media y una cucharadita de tintura de equinácea cada hora, disminuyendo gradualmente la dosis a medida que los síntomas remitan.

Si el picor y la irritación son muy intensos, toma varias tazas al día de una infusión a partes iguales de manzanilla, lavanda y melisa. Para aumentar el efecto calmante y analgésico de la infusión, toma también una cucharadita de tintura de valeriana varias veces al día.

LAVADO DE OJOS CON PLANTAS MEDICINALES

Utiliza esta mezcla de plantas para tratar la conjuntivitis sin antibióticos. Asegúrate de colar bien el líquido, pues no debe quedar ninguna partícula de planta en el agua. Si lo prefieres, mezcla las plantas medicinales con un poco de agua caliente hasta obtener una pasta, extiéndela sobre una gasa y aplícala como una cataplasma sobre los ojos.

1 cucharada de raíz de consuelda en polvo

1 cucharadita de sello de oro de cultivo ecológico en polvo

1 taza de agua hirviendo

1. Diluye los polvos en el agua; luego cuela la mezcla a través de dos o tres capas de muselina o un filtro de café fino. Deja que el líquido se enfríe a temperatura ambiente.

2. Utiliza un lavaojos o un cuentagotas para lavarte los ojos con la infusión varias veces al día. Aplícala diariamente hasta que los síntomas remitan, generalmente en unos cuatro o cinco días.

Estreñimiento

En caso de estreñimiento, la fitoterapia es el mejor tratamiento, y desaconsejo la medicina alopática, pues no está pensada para corregir el problema, sino únicamente para revertir los síntomas. En caso de estreñimiento crónico, consulta a un naturópata.

Si no evacúas al menos una vez al día, padeces estreñimiento. Haz todo lo posible por eliminar los factores dietéticos que puedan estar contribuyendo al problema; el queso, la pasta y el pan son algunos de los alimentos que suelen provocarlo. Muchas veces, la causa principal es la tensión y el estrés; en estos casos, el ejercicio físico siempre es útil. Otra causa es la deshidratación; procura beber entre seis y ocho vasos de agua al día.

 

También puedes tomar a diario una cucharada de semillas molidas de zaragatona (Plantago psyllium) junto con semillas de lino. Añádelas a los cereales, las ensaladas y otros platos. Cuando tomes estas semillas debes beber varios vasos de agua al día.


HINOJO

REMEDIO PARA EL ESTREÑIMIENTO

La experiencia me demuestra que la romaza crespa (Rumex crispus} es ideal para el estreñimiento y no genera dependencia.

2 partes de raíz de romaza crespa

1 parte de raíz de diente de león

1 parte de raíz de regaliz

Mezcla los ingredientes y prepara una decocción siguiendo las indicaciones de la pág. 358. Toma 3 tazas al día.

REMEDIO DE EMERGENCIA PARA EL ESTREÑIMIENTO

Prueba esta fórmula cuando necesites estimular el tránsito intestinal. Utilízala solo de manera puntual, pues el sen y la cáscara sagrada son muy potentes y pueden crear dependencia si se toman a menudo.

4 partes de semillas del hinojo

3 partes de raíz de regaliz

2 partes de raíz de romaza crespa 1 parte de cáscara sagrada

1 parte de semillas de zaragatona

1 parte de sen

Mezcla los ingredientes y prepara una decocción siguiendo las indicaciones de la pág. 358. Empieza tomando una o dos tazas y aumenta la dosis si fuera necesario.