Czytaj książkę: «Identidad Organizacional»
Gonzales-Miranda, Diego René
Identidad organizacional: un proceso de construcción liminal / Diego René Gonzales-Miranda. – Medellín: Editorial EAFIT, 2020
446 p.; 24 cm. --(Colección Académica)
ISBN: 978-958-720-686-9
ISBN: 978-958-720-687-6 (versión EPUB)
1. Comportamiento organizacional. 2. Cultura corporativa. 3. Cultura corporativa – Colombia. I. López Gallego, Francisco. II. Tít. III. Serie
302.35 cd 23 ed.
G643
Universidad EAFIT – Centro Cultural Biblioteca Luis Echavarría Villegas
Identidad organizacional
Un proceso de construcción liminal
Primera edición: diciembre de 2020
© Diego René Gonzales-Miranda
ORCID: https://orcid.org/0000-0003-1211-0656
© Editorial EAFIT
Carrera 49 No. 7 sur - 50
Tel.: 261 95 23, Medellín
http://www.eafit.edu.co/fondoeditorial
Correo electrónico: fonedit@eafit.edu.co
ISBN: 978-958-720-686-9
ISBN: 978-958-720-687-6 (versión EPUB)
DOI: https://doi.org/10.17230/9789587206869lr0 h
Edición: Marcel René Gutiérrez
Diseño y diagramación: Alina Giraldo Yepes
Imagen de carátula: 398997100, ©shutterstock.com
Universidad EAFIT | Vigilada Mineducación. Reconocimiento como Universidad: Decreto Número 759, del 6 de mayo de 1971, de la Presidencia de la República de Colombia. Reconocimiento personería jurídica: Número 75, del 28 de junio de 1960, expedida por la Gobernación de Antioquia. Acreditada institucionalmente por el Ministerio de Educación Nacional hasta el 2026, mediante Resolución 2158 emitida el 13 de febrero de 2018
Prohibida la reproducción total o parcial, por cualquier medio o con cualquier propósito, sin la autorización escrita de la editorial
Editado en Medellín, Colombia
Diseño epub: Hipertexto – Netizen Digital Solutions
A Rafael, María Antonia y Alexandra
Por aquello que en el pasado fue reconocido, por aquello que lucha por trascender en el futuro, por aquello que somos gracias a la seguridad del presente.
A nuestra liminal identidad...
Agradecimientos
La investigación que realicé, y que está a la base del presente texto, versó sobre la identidad. El ¿quién soy? es dialógico, y por tanto, su respuesta necesita de los demás, se construye en comunidad. El hombre como ser en relación, lo es en tanto encuentra un tú que lo constituye como persona. Así, la respuesta a la pregunta que me planteé en el ámbito organizacional se logró gracias a muchos otros que me acompañaron en el proceso. Mi reconocimiento y gratitud a todos ellos, en especial, gracias Prof. Luis por sus consejos, reflexiones, discusiones y sugerencias que me acompañaron a lo largo de todo este proceso y seguirán presentes en mi vida. Gracias por todo lo aprendido y vivido.
Gracias a la Universidad EAFIT (Colombia) por las posibilidades que me brindó para realizar esta investigación, en especial a quien fuera su decano, Francisco López, y al actual, Ricardo Uribe, por su apoyo incondicional. Una mención especial a Rodrigo Muñoz por la disposición y apertura, artífice de mi experiencia intelectual y académica en México. Gracias a la Universidad Autónoma Metropolitana (México) por acogerme y brindarme la oportunidad de estudiar y aprender en su recinto. Gracias Germán por la confianza y dedicación. Y cómo no agradecerles a Alejandra, Rosalba y Juan Carlos por su gentil disposición y colaboración.
Gracias a Comercial Nutresa por su apoyo y apertura en la realización del estudio de caso. A Álvaro Arango, Patricia Garcés y Liliana Crespo, así como a todos aquellos que gentilmente me colaboraron. Una mención especial a Diego Paz† por creer en mi proyecto y quien fuera el promotor de realizar la investigación en esta compañía.
Gracias Beatriz por la amistad, consejo, escucha, cercanía, dedicación y por todo lo que me enseñaste. En mucho, esta investigación es gracias a tu apoyo, aliento, confianza y acompañamiento.
Gracias Guillermo por tu gentileza, calidez, cercanía y amistad. En ti se sintetiza el valor de la palabra cumplida, y, en ella, el sostén de toda buena amistad. Aprendí mucho más por fuera de las aulas.
Gracias a Juan Carlos, Mariano y Carmen. Los espacios de diálogo y las discusiones construidas con ustedes me ayudaron a clarificar muchas de las dudas que surgieron.
Gracias Ayuzabet por todo el acompañamiento que me brindaste en este largo y difícil pero enriquecedor camino de la vida y de las ideas.
Por último, y siempre primeros, gracias a mis padres, a René y a María, porque apoyaron siempre mis decisiones y me recalcaron la importancia del estudio. Esta investigación es gracias a ustedes, y también les pertenece.
Contenido
Presentación
Francisco López Gallego
Introducción
Una pregunta por la propia identidad que se torna pregunta de investigación
Capítulo 1. Sobre la identidad organizacional
Introducción
Contexto, importancia y problemática
Fundamentos
Fundamentos disciplinares
Desde la filosofía
Desde la sociología
Desde la psicología
Desde la antropología
Fundamentos ontológicos
Fundamentos epistemológicos
Convergencias y divergencias en torno al concepto
A partir de definición seminal de Albert y Whetten
El carácter central
El carácter distintivo
El carácter continuo
Una aproximación de lo que sí es
Una aproximación de lo que no es
Paradigmas, perspectivas y discusiones
Paradigmas subyacentes
Perspectivas de análisis
Narración y discurso
Construcción identitaria
Regulación y resistencia
Audiencia e identidad
Estabilidad y cambio
Otras perspectivas de análisis
Conversaciones en relación con el concepto
Perdurable
Autorreferencial e intersubjetiva
Múltiples identidades
Cambio
Dialogal y relacional
Conversaciones en relación con otros términos
Identidad social
Identidad e identificación
Identidad personal
Discusión: consideraciones para futuras conversaciones
Recapitulación
Capítulo 2. Pespectiva, propuesta teórica y referentes conceptuales
Introducción
Perspectiva o enfoque teórico: los estudios organizacionales
Contexto y surgimiento
La Segunda Guerra Mundial
Las protestas de los años 1960 y 1970
El triunfo de los mercados
Una caracterización inacabada
Lo ontológico
Lo epistemológico
Lo metodológico
Acercamientos a una definición
Su objeto de estudio
Una mirada desde el movimiento de la contingencia
La organización, las organizaciones y lo organizando
Marcos teóricos para el estudio de las organizaciones
Su relación con las ciencias sociales y su perspectiva crítica
En relación con las ciencias sociales
Su perspectiva crítica
Recapitulación sobre los estudios organizacionales
Marco de referencia conceptual
Los mandos medios
El rol de los mandos medios
Sobre la identidad personal
Sobre la identidad grupal: lo social, lo colectivo y lo profesional
Construcción de identidad organizacional
Discusión de la propuesta teórico-metodológica
La alta dirección y los procesos de institucionalización (tesis)
La construcción de sentido de los mandos medios (antítesis)
La identidad organizacional como una síntesis
Un modelo para el análisis teórico y metodológico
Recapitulación
Capítulo 3. La construcción de un camino propio para explorar la identidad organizacional
Introducción
Algunas consideraciones metodológicas y diseño general
El estudio de caso
Unidad de análisis y objeto de estudio
Actores sociales de la investigación
Mandos medios
Directivos
Instrumentos metodológicos
Revisión documental
Entrevistas semiestructuradas
Observación no participante (panorámica)
Trabajo de campo: fases del proceso investigativo
Fase de exploración
Fase de focalización
Fase de profundización
Sistema categorial de los datos obtenidos
Fase de descripción
Fase de interpretación
Fase de constitución de sentido y de constitución teórica
Relevancia de las categorías de análisis
Recapitulación
Capítulo 4. Identidad organizacional en Comercial Nutresa S. A. S.
Introducción
El Grupo Empresarial Antioqueño
Grupo Nutresa
Comercial Nutresa
Creación de la empresa
Componentes y estructura
Visión, misión y valores
Cultura organizacional de Comercial Nutresa
Dimensiones de la cultura organizacional
Componentes de la cultura organizacional
Evaluación de la cultura corporativa
Clima organizacional
Retos y desafíos
Contextualización de la problemática: caso Comercial Nutresa
Contextualización a partir de los ejes de referencia
El frente comercial: el eslabón tensionante
Recapitulación
Capítulo 5. Hallazgos desde el punto de vista de los directivos
Introducción
Organizaciones de origen
Liderazgo
Referencia para gestionar
Categoría emergente principal: modelo eficiente de gobierno
La instrumentalización de la razón: una revisión al concepto
El trabajo humano: escenario de paradojas y contradicciones
La autonomía del hombre desde la teoría administrativa
¿Una nueva modalidad de ergonomizar (controlar) el alma?
Una búsqueda de control identitario
Una autonomía que se subordina
Una mirada ética a la administración
La administración y los actos del hombre
La administración y los actos humanos
Una reflexión que invita al diálogo
Recapitulación
Capítulo 6. Hallazgos desde el punto de vista de los mandos medios
Introducción
¿Quiénes son los mandos medios?
Categorías emergentes
Organizaciones de origen
Historia personal-profesional-organizacional
Categorías emergentes principales
Reconocimiento
Formas de reconocimiento, ideología y ofensas morales
Un reconocimiento con tinte ideológico
La respuesta de los mandos medios
Trascendencia
Seguridad
Personal
Profesional
Organizacional
La seguridad y el proceso de construcción identitaria
Construcción de identidad organizacional de los mandos medios
Una construcción identitaria que se resiste a ser fabricada
Lo liminal dentro del ámbito organizacional
La identidad organizacional en equilibrio liminal
Recapitulación
Capítulo 7. Reflexiones finales
Comentarios generales
A nivel teórico
A nivel metodológico
Sobre lo organizacional
Limitaciones y posibilidades de investigación futuras
Referencias
Notas al pie
Índice de tablas
TABLA 1. Definiciones de la IO desde distintos niveles de análisis
TABLA 2. Paradigmas en relación con la identidad organizacional
TABLA 3. Número de entrevistas a los MM por gerencias y regiones
TABLA 4. Preguntas de las entrevistas en relación a las categorías preliminares
TABLA 5. Visión general de las fuentes de datos
TABLA 6. Preguntas iniciales respecto a los MM
TABLA 7. Relación objetivos-categorías de análisis
TABLA 8. Resultados Atlas.ti - Fundamentación y densidad de las categorías
TABLA 9. Hechos importantes del Grupo Nutresa
TABLA 10. Valores de Comercial Nutresa
TABLA 11. Ritos y celebraciones que desean vivir en la nueva cultura
TABLA 12. Caracterización de los empleados según las compañías de GN
TABLA 13. Similitudes y diferencias en la caracterización de los empleados
TABLA 14. Tendencias de gestión desde 1950 al 2000
TABLA 15. Niveles de autorrelación, formas de reconocimiento y tipos de ofensas morales
Índice de gráficas
GRÁFICA 1. Los MM en el centro de los estamentos organizacionales
GRÁFICA 2. El proceso dialéctico de construcción identitaria
GRÁFICA 3. Modelo de análisis metodológico: aspectos constituyentes IO de MM
GRÁFICA 4. Relación entre la identidad personal y profesional y la IO
GRÁFICA 5. Diseño general de la investigación
GRÁFICA 6. Espiral del conocimiento y fases del proceso investigativo
GRÁFICA 7. Aspectos que intervienen en el análisis de los datos
GRÁFICA 8. Segundo sistema categorial: construcción de IO de los MM
GRÁFICA 9. Relación y clasificación de las categorías de análisis de los MM
GRÁFICA 10. Relación y clasificación de las categorías de análisis de los directivos
GRÁFICA 11. Categorías preliminares y emergentes desde MM
GRÁFICA 12. Categorías preliminares y emergentes desde directivos
GRÁFICA 13. Construcción de las categorías emergentes de los directivos
GRÁFICA 14. Construcción de las categorías emergentes de los mandos medios
GRÁFICA 15. Estructura del Grupo Nutresa
GRÁFICA 16. Estructura organizacional de Comercial Nutresa
GRÁFICA 17. Ritos y celebraciones anteriores
GRÁFICA 18. Categorías preliminares, actores sociales y ejes de referencia
GRÁFICA 19. Formas de control
GRÁFICA 20. Identidad personal, profesional y organizacional en el tiempo
GRÁFICA 21. Construcción identitaria de los MM como proceso liminal
GRÁFICA 22. Construcción de la IO como un equilibrio liminal
Presentación
Narra el mito griego que Minos, rey de la isla de Creta, debía honrar a Poseidón sacrificándole cada año al más hermoso de los toros de su hato. Sin embargo, en una ocasión el monarca, incapaz de renunciar al animal correspondiente debido a su indecible belleza, tuvo a bien reemplazar al toro por otro ejemplar de inferior condición, creyendo inútilmente que el dios no se percataría del ardid. En venganza, la colérica divinidad de los mares infundió en Pasifae, esposa de Minos, un apetito sexual indomeñable por el toro verdadero.
La reina, en búsqueda de la satisfacción de semejante impulso, se sirvió de un complejo disfraz de vaca confeccionado por Dédalo y halló la forma posible de engañar y seducir al toro para que la poseyera. De esa unión, a todas luces ilegítima, fue concebida una criatura monstruosa con cabeza de toro y cuerpo de hombre cuya naturaleza indomable hizo meritorio que nuevamente Dédalo prestara su auxilio al rey, en este caso para construir con ayuda de su hijo Ícaro, un enorme laberinto que permitiera mantener a buen recaudo a la terrible bestia que sería conocida como Minotauro.
En pago de una antigua ofensa contra Creta, Atenas debía sacrificar catorce vírgenes de ambos sexos cada nueve años, quienes eran devorados por la feroz criatura que habitaba el laberinto. Una de sus víctimas alcanzó a profetizar en su último momento, que en alguno de los grupos llegaría un joven que le daría muerte a la bestia. El vaticinio habría de cumplirse en tiempos del reinado de Egeo, quien ocultó en el lote de vírgenes a su hijo Teseo.
A su llegada a la isla de Creta el príncipe ateniense y la hija del rey Minos, Ariadna, sintieron el uno por el otro el más verdadero de los amores, aquel que solo se da en el intercambio del primer gesto, de la primera mirada. La fuerza de Eros hizo que el hijo de Egeo le confesara a su amada que tenía por misión dar muerte al Minotauro. A sabiendas del destino deparado a su amado, la hermana de la bestia ideó, una vez más con ayuda de Dédalo, la manera de evitar que Teseo se perdiera en el laberinto entregándole una madeja de hilo que lo guiara de regreso hacia la entrada en caso de que Fortuna lo acompañara en su propósito.
Una vez muerto el monstruo a manos de Teseo, el príncipe se hizo a la mar de regreso a Atenas acompañado de Ariadna, mientras que Egeo observaba desde los riscos esperando ver a lo lejos la embarcación. El padre le había hecho prometer a nuestro héroe que, para notificarle la supervivencia y la victoria, habría de cambiar la original vela negra en el mástil por una vela blanca. Empero, en medio de la dicha por el amor y el triunfo, Teseo olvidó cumplir la promesa.
Fue así que Egeo al ver a lo lejos que la nave tenía izada la vela negra creyó que la barca portaba el cadáver de su hijo. El rey de Atenas no soportó su dolor ni su culpa por haberlo enviado hacia las fauces del Minotauro y se arrojó al acantilado para encontrar la muerte en el mar que ahora lleva su nombre.
El barco que traería de regreso a los jóvenes vírgenes con Teseo al mando fue conservado por sucesivas generaciones de atenienses mediante continuas mudas, retoques y recambios, hasta el punto que la embarcación que había llevado y traído a Teseo no contaba ya con una sola de sus tablas, clavos ni bisagras originales.
Esta narración ha permitido la formulación de una impertinente pregunta que apunta al problema de la identidad y que hoy conocemos como la paradoja de Teseo, la cual podría expresarse de la siguiente forma: la barca que ahora vemos en el relato ¿es realmente la barca de Teseo? O como suele ser más reconocida: notificados de las recurrentes reformas que sufrió el navío para su constante reparación, al punto de que en ella no existe ya la más minúscula de las cuñas de madera originales, ¿podríamos decir que se trata de la misma barca?
En otra narración, más cercana en el tiempo, Borges1 nos relata los lamentos de un desdichado llamado Asterión, quien es aquejado de inefable soledad en su enorme casa, de la que promete no volver a salir nunca debido al desprecio de la gente.
A pesar de que la formidable casa de Asterión permanece con las puertas abiertas para, como él mismo afirma, “que entre el que quiera”, el abandonado es acusado de soberbia, misantropía y locura. Para hacer más insufrible el tedio, nuestro protagonista declara ser analfabeto; ante la sucesión interminable de largas noches el desventurado deplora: “Jamás he retenido la diferencia entre una letra y otra. Cierta impaciencia generosa no ha consentido que yo aprendiera a leer”.
En rescate de esa soledad, de tanto en tanto algunas gentes entran a su casa para que Asterión los libere de todo mal: “Oigo sus pasos o sus voces en el fondo de las galerías de piedra y corro alegremente a buscarlos. La ceremonia dura pocos minutos”.
En cierta ocasión uno de esos visitantes le notifica al sufriente que algún día llegaría su redentor. La dicha por la noticia invade al adolorido: “Desde entonces no me duele la soledad”, dice Asterión, “porque sé que vive mi redentor y al fin se levantará sobre el polvo [...] Si mi oído alcanzara todos los rumores del mundo, yo percibiría sus pasos. Ojalá me lleve a un lugar con menos galerías y menos puertas. ¿Cómo será mi redentor?”.
La narración de Borges nos priva de asistir al encuentro de Asterión con su redentor, y solo nos permite saber el final de la historia:
“El sol de la mañana reverberó en la espada de bronce. Ya no quedaba un vestigio de sangre.
—¿Lo creerás, Ariadna? –dijo Teseo–. El minotauro apenas se defendió”.
Como vemos en este cuento de Jorge Luis Borges, titulado “La casa de Asterión”, la narración se subvierte. Los lectores menos avezados, al no conocer el nombre del Minotauro, nos notificamos con sorpresa de que la terrible bestia de la primera historia es el mismo sufriente que libera de todos los males a los “visitantes” quienes eventualmente acuden hacia él. Advertimos también que la enorme casa es el laberinto construido por Dédalo y que la criatura que en el primer relato nos despierta el más terrible horror, en la segunda narración nos provoca sentimientos de lástima y ternura. De igual manera, nos percatamos de que el príncipe Teseo quien en la primera historia es el furtivo asesino de la bestia, en la segunda se trata del anhelado liberador que redime al sufriente Asterión. Desde un paradigma esencialista la paradoja de Teseo puede ser resuelta de manera afirmativa apelando al concepto de la esencia, es decir, aunque la embarcación no tiene ya ni uno solo de los atributos materiales originales conserva su ontología esencial. Sin embargo, dicha solución es metafísica y poco satisfactoria más allá de la metafísica misma. Por otros caminos, los aportes del profesor Gonzales nos suscitan la idea de que tal vez importa más la construcción narrativa que los atenienses hicieron con las narraciones que ellos mismos habían hecho previamente, en conjunción con las construcciones que otros habían hecho y harán sobre ellos.
Ahora bien, en el presente texto, el profesor Gonzales, después de una juiciosa revisión de la literatura sobre el tema de la identidad organizacional, logra hacer distinción de otros dos paradigmas diferentes al esencialista, a saber, el constructivista y el discursivo, y toma partido por el constructivista como puede advertirse de forma explícita en el título del libro. Su posición encuentra cabida en un tema específico poco atendido en el ámbito de los estudios organizacionales, a saber, lo liminal. En esta determinación se encuentra a mi modo de ver uno de los principales aportes de su trabajo.
Parodiando el famoso apotegma de Sartre, el cual afirma que cada hombre es lo que hace con lo que hicieron de él, podríamos decir que la identidad individual y organizacional es la construcción que un individuo o un grupo organizado va haciendo con sus vivencias propias, pero también con las construcciones que otros van haciendo sobre él.
En ese sentido, de la investigación del profesor Gonzales nos queda claro que la pregunta por el ¿quién soy? es dialógica y, en esa medida, su respuesta necesita de los otros, se construye en interacción de narraciones de la comunidad. En sus propias palabras: “El hombre como ser en relación, lo es en tanto encuentra un tú que lo constituye como persona”.
En “La casa de Asterión” ello es aún más evidente: ¿quién es el verdadero Minotauro: la bestia carnívora y despiadada, o el sufriente y abandonado; aquello que Asterión narra de sí mismo y de su sufrimiento; lo que los atenienses relataban sobre él, o lo que sobre él dijeron Minos, Pasifae, Ariadna y Teseo? O bien: ¿las construcciones que el lector y yo estamos haciendo en este momento?
El recurso a lo liminal nos autoriza a superar el principium tertii exclusi de Aristóteles. La perspectiva liminal aportada por Gonzales nos permite, entre otras cosas, admitir que tal vez la respuesta identitaria de Asterión es el constructo que él mismo haría con todas esas construcciones; o mejor, que el propio Asterión iría haciendo, en un permanente cambio, de forma análoga a lo acontecido con las recurrentes modificaciones de la barca de Teseo. Es así como las identidades personales llevan expectativas de la interacción presente y futura en relación con los otros.
En el presente libro, el problema se ciñe a la desestabilización de la identidad como algo dado y relativamente seguro, y un creciente interés por considerarla como objeto y medio de los esfuerzos de regulación por parte de la administración. El lector porta el resultado de la labor investigativa del profesor Gonzales, trabajo de carácter cualitativo que se realizó bajo la modalidad de estudio de caso en la compañía Comercial Nutresa S. A. S. de Medellín (Colombia) y que, desde la perspectiva crítica y pluridisciplinaria de los estudios organizacionales, se propuso definir la identidad organizacional como un diálogo entre la organización y los mandos medios.
El análisis de dicho diálogo le permitió al profesor avisarse de la identidad organizacional a modo de un proceso liminal, en el cual la conjunción de los factores que intervienen en el proceso configuran un espacio no-estructural en donde el cambio, la resistencia y la constante significación caracterizan la identidad organizacional de los empleados de línea media de la organización estudiada, a saber: el reconocimiento, la trascendencia y la seguridad, vinculados a categorías temporales del pasado, futuro y presente, respectivamente.
Ahora bien, la diversidad de perspectivas teóricas delimita los estudios organizacionales como un campo de conocimiento que se sirve de la panoplia de las ciencias sociales en la búsqueda de comprensión de las dinámicas sociales que son concomitantes al fenómeno organizacional, un campo abierto a múltiples racionalidades, que hacen posible comprender problemas organizacionales, antes que resolver asuntos prácticos específicos de corte operativo y funcional. En ello radica la coherencia con la definición de estudios.
En esa medida el lector encontrará cinco perspectivas teóricas delimitadas por el profesor Gonzales: regulación y resistencia, estabilidad y cambio, construcción identitaria, narración y discurso, audiencia e identidad, además de distintas discusiones en relación con el concepto mismo de identidad organizacional.
El texto expone, además, los procesos de construcción del modelo metodológico y de los sistemas categoriales relacionados con la investigación desde la perspectiva de los estudios organizacionales. Señala las sendas transitadas para construir las categorías de análisis y los sistemas de categorías que permiten dar sentido a los datos obtenidos para responder a los objetivos propuestos. Se trata del proceso metodológico que subyace a toda investigación y que pocas veces se hace explícito, lo que permitirá a otros investigadores tener un referente y alternativas para la realización de su propio proyecto de construcción de sentido, un aspecto primordial –sino el más importante– del proceso de aprendizaje de todo investigador.
Pero, sobre todo, su aporte consiste en correr el velo sobre un problema no advertido hasta el momento, referido al hecho de la casi inexistente relación de trabajos que vinculen el tema de la identidad organizacional con la cultura organizacional, con lo cual uno puede darse por notificado de que la temática de la identidad organizacional se constituirá en sí misma en una corriente de estudios de los estudios organizacionales.
Francisco López Gallego